Ashwagandha Ecológica en Polvo

Ashwagandha es una planta muy conocida en la medicina ayurvédica y la evidencia de su uso se remonta a más de 3000 años. Su nombre botánico es Withania somnifera y pertenece a la familia de las Solanáceas, al igual que el tomate, la berenjena, la solanácea, el tabaco y también la patata.
Es un arbusto herbáceo, leñoso en la base, que alcanza una altura de unos 170 cm y crece de forma espontánea o puede cultivarse. También conocida como “Rey y Reina de las hierbas” o “cereza de invierno”, es cada vez más conocida y apreciada por sus propiedades.

Withania somnifera es un arbusto herbáceo leñoso. Pertenece a la familia de las Solanáceas, al igual que el tomate y al igual que el tomate tiene pequeñas flores de color amarillo verdoso y hojas ovaladas. El color de los frutos varía del rojo al amarillo anaranjado según la madurez y parecen tomates pequeños. La planta está cubierta de plumón que le da un reflejo gris cerúleo.
La Ashwagandha es originaria del norte de África, Oriente Medio y sobre todo de la India, donde, gracias a sus propiedades, se considera la planta más popular y por eso se la llama "ginseng indio".

Ashwagandha deriva del sánscrito ashwa que significa “caballo”, el origen de este nombre proviene de que a partir de la raíz de esta planta era capaz de dar a las personas la fuerza de un semental. Otra teoría afirma que el significado literal de la palabra ashwagandha es "olor a caballo" porque las raíces frescas de la hierba tienen un olor desagradable.
El nombre de la especie somnifera proviene del latín y puede traducirse como “inductor del sueño”, esto haría referencia a su capacidad para mejorar la calidad del sueño. Existen testimonios que permiten comprender que la raíz de esta planta ya era utilizada hace muchos años por la población india. De hecho, además de utilizarse como alimento, la raíz se explota sobre todo en la medicina popular y ayurvédica.

El polvo que se obtiene de la raíz de Ashwagandha tiene un sabor amargo y un olor desagradable, pero tiene buena solubilidad, por este motivo se recomienda tomar el polvo mezclado con otros alimentos para que su ingesta sea más placentera.
El método de procesamiento es muy importante, el polvo de Ashwagandha debe procesarse a bajas temperaturas para conservar intactos todos sus nutrientes.

El polvo orgánico de Ashwagandha se considera una excelente manera de integrar esta raíz en su dieta.
Combina bien con zumos de frutas, chocolate, yogur o leche y mucho más... La Ashwagandha en polvo se puede disolver en bebidas, batidos o añadir a masas de pasteles y galletas o en recetas saladas. El té de Ashwagandha es otra forma de consumir la raíz y puedes agregar un poco de miel de manuka para realzar el sabor.

El polvo de Ashwagandha tiene un sabor muy particular y se puede tomar de varias formas:

• en batidos o zumos de frutas
• en yogur y leche
• junto con muesli u otros frutos secos y semillas oleaginosas
• como ingrediente en postres caseros
• en ensaladas o como condimento
• para caldos o sopas
• en infusiones o tés de hierbas