Hierba de Cebada Ecológica en Polvo

La cebada es un cereal ampliamente utilizado como alimento, del cual se obtiene una hierba excepcional, rica en nutrientes. Es especialmente conocida por sus cariopsides o semillas. Ha sido un alimento muy utilizado y apreciado desde la antigüedad debido a sus propiedades beneficiosas.

La hierba de cebada se refiere a las hojas recién brotadas de la planta de cebada. Estas son las primeras hojas, cosechadas en su etapa inicial de desarrollo después de la germinación y obtenidas mediante un proceso especial de secado de la parte joven de la planta.

Nuestra hierba de cebada proviene de agricultura ecológica. Se presenta como un polvo verde brillante. El polvo debe ser fino y sin tallos ni venas.

Su aroma es ligeramente penetrante, con reminiscencias del heno, como el de un césped recién cortado. Su sabor es particularmente delicado, con un toque dulce y ligeramente ácido.

Su sabor sutil pero distintivo realza el carácter de cualquier receta.

El método de secado en frío es fundamental: debe secarse a bajas temperaturas para conservar intactos todos sus nutrientes.

La hierba de cebada se puede consumir en las siguientes formas:

FRESCA, en jugo.
SECO, en polvo para añadir a batidos o como especia en recetas.
COMPLEMENTO ALIMENTICIO, en cápsulas o comprimidos.
El jugo se extrae prensando la hierba y debe consumirse inmediatamente; de ​​lo contrario, podría perder todas sus propiedades beneficiosas.

El polvo, en cambio, es más práctico, ya que conserva sus nutrientes durante más tiempo. Se puede añadir como ingrediente a las recetas, ¡enriqueciéndolas con sabor!

Se puede añadir a platos salados, sobre verduras, asados ​​o patatas... Pero lo más importante, se puede mezclar con cualquier bebida, fruta, batido o como ingrediente en preparaciones de jugos verdes.

La cebada, o cebada común, es una planta herbácea de la familia de las gramíneas, cuyo nombre científico es Hordeum vulgare.

La cebada es una gramínea anual que crece en otoño (cultivares de otoño) y primavera (cultivares de primavera). Conocida desde la antigüedad, fue uno de los primeros cultivos en cultivarse a gran escala.

El origen de sus formas ancestrales se encuentra en Oriente Próximo, concretamente en la región que abarca los actuales Israel, Jordania, Siria y el sur de Anatolia.

Es una planta extremadamente adaptable, por lo que está ampliamente distribuida en todo el mundo, especialmente en Europa. Se puede cultivar desde el nivel del mar hasta grandes altitudes, como los 4500 metros en los Andes o el Himalaya, donde madura en poco tiempo.